Ser flexible.

“La verdadera medida de la sabiduría es cómo reaccionas ante la adversidad.” 

Epicteto

 

El día a día está lleno de situaciones que pueden estresarnos o sacarnos de nuestros momentos de paz. ¿Quién no ha sentido frustración cuando las cosas no salen como las planeamos? Ese momento en el que la rabia recorre tu cuerpo y te enfadas porque después de mucho esfuerzo resulta que algo sale mal. Es en esos momentos cuando ser flexible se vuelve fundamental para nuestra felicidad y bienestar.

Seguro que te será fácil recordar algún momento en el que tenías planeado algo de manera muy clara: un viaje, una reunión o una comida con amigos que te hacía mucha ilusión. De repente, algo surge: se retrasa tu vuelo, el tráfico impide que llegues a la reunión o alguno de tus amigos se pone enfermo. En este tipo de situaciones, donde los acontecimientos se escapan de nuestro control, si eres rígido y te aferras a tu plan original, es probable que te sientas más frustrado y estresado. Sin embargo, si eres flexible y te adaptas, podrás encontrar maneras de seguir adelante sin que esos cambios te afecten tanto.

Cuando somos flexibles, podemos ajustar nuestros planes y estrategias según las circunstancias. Esto no solo nos hace más resilientes, sino que también nos ayuda a mantenernos motivados y positivos, incluso cuando enfrentamos desafíos.

Pero, ¿cómo logramos ser más flexibles?

¿Cómo podemos evitar que la frustración porque algo no salga según lo planeado nos afecte negativamente y arruine nuestro día?

Establece metas claras, pero sé flexible en el camino:

Define tus objetivos con claridad, pero mantén la mente abierta sobre cómo alcanzarlos. Permítete ajustar tu plan según las circunstancias cambiantes. Recuerda que el camino hacia tus metas no es recto.

Transforma los obstáculos en oportunidades:

Busca soluciones alternativas y aprende de cada dificultad. No permitas que un obstáculo arruine todo.

Recuerdo cuando viajé a Nueva York; el día que llegamos, una gran tormenta de nieve se apoderó de la ciudad. En lugar de quedarnos en el hotel lamentándonos de nuestra mala suerte, compramos unos paraguas y fuimos a ver Times Square libre de turistas. Paseamos por una ciudad nevada y diferente a la que esperábamos, pisamos algún charco inoportuno y, sobre todo, nos reímos y disfrutamos muchísimo. Esta elección nos permitió experimentar la ciudad de una manera única y diferente a lo esperado. Convertimos un obstáculo en una oportunidad para descubrir y disfrutar un lado de Nueva York que no habríamos experimentado de otra manera.

Mantén una mente abierta:

Acepta nuevas ideas y perspectivas. La flexibilidad implica estar dispuesto a cambiar de opinión y adaptarse a nuevas situaciones.

A veces nos aferramos a una idea, lo cual en lugar de ayudarnos a avanzar, nos obstaculiza. Cambiar de opinión no es algo malo; tienes el derecho de hacerlo y de elegir el camino que más te convenga en este momento. Nuestro crecimiento personal suele estar acompañado de cambios de opinión, por lo que debemos abrazar nuestra nueva versión y mantener coherencia en nuestra actitud frente a esos cambios.

Desarrolla técnicas de manejo del estrés:

Practica la respiración profunda, la meditación, el ejercicio regular o cualquier otra técnica que te ayude a mantener la calma y a tomar decisiones claras bajo presión. Este tipo de prácticas será esencial para canalizar nuestra frustración en esos momentos de imprevistos.

Haz pequeños cambios en tu rutina diaria:

Introducir variaciones en tu rutina puede ayudarte a acostumbrarte a la idea de adaptarte constantemente. Por ejemplo, toma diferentes rutas al trabajo o intenta nuevas actividades.

Este ejercicio de adaptarte a lo desconocido en las nuevas actividades puede ser un buen entrenamiento para ser más flexible.

Conócete a ti mismo:

Conocerte a ti mismo es fundamental en todas las áreas de la vida. Entender cómo reaccionas en diferentes situaciones, lo que te genera estrés o te ayuda a mantener la calma, te guiará para actuar de la mejor manera posible. Comprender tus fortalezas, debilidades, preferencias y límites facilitará la toma de decisiones alineadas con tus objetivos y te permitirá ajustar estrategias según sea necesario.

Reflexiona y aprende de tus experiencias:

Reflexiona sobre tus éxitos y fracasos. Identifica qué funciona y qué no, y utiliza esa información para ajustar y mejorar continuamente.

Busca el apoyo de otros:

Conversa con amigos, familiares sobre tus desafíos y obtén nuevas perspectivas. A veces, un punto de vista externo puede ofrecer soluciones que no habías considerado.

Practica la gratitud:

Enfócate en las cosas positivas de tu vida y en lo que has logrado. La gratitud puede cambiar tu perspectiva y ayudarte a mantenerte positivo incluso cuando las cosas no salen según lo planeado. Mantener un diario de gratitud o hacer una lista de logros puede ser muy útil para recordar tus éxitos y apreciar las pequeñas cosas que enriquecen tu vida.

 

Ser flexible es clave para manejar el estrés y mantener nuestra paz interior. Nos ayuda a adaptarnos a los cambios sin sentirnos abrumados y a seguir adelante con una actitud positiva. Si somos demasiado rígidos, solo aumentaremos nuestra frustración. Pero si aprendemos a ser flexibles, podremos enfrentar los desafíos con más calma y éxito, manteniendo nuestra felicidad y bienestar a lo largo del camino.

 

En el coaching, la flexibilidad es vital para guiar a los clientes hacia sus metas, adaptando estrategias y planes según sus necesidades cambiantes. Integrar la adaptabilidad en nuestra vida diaria nos permite no solo alcanzar nuestras metas de manera más efectiva, sino también disfrutar del proceso de crecimiento y aprendizaje continuo. Al abrazar la flexibilidad, nos preparamos mejor para cualquier cambio que la vida nos presente.

No siempre podemos cambiar la situación, pero sí podemos cambiar nuestra actitud. Podemos ver cada problema como una catástrofe y quejarnos durante días, o podemos buscar alternativas y enfrentarlos con una actitud positiva.

¿Qué clase de persona quieres ser? ¿Alguien que se queda anclado en el inconveniente o alguien que busca soluciones y sigue adelante?

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